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Un año sin ganancia para los productores de soja En el mejor de los casos, solo en los cultivos de primera, se cubrirán los costos

El Observador: Los rendimientos que se van apreciando en la cosecha de soja de primera permitirán, en el mejor de los casos, que los agricultores cubran los costos productivos, sin obtener un margen de ganancia al menos mínimo. Muchos, incluso, perderán dinero en la explotación del cultivo más extendido en la chacra uruguaya, ocupando este año cerca de 1,4 millones de hectáreas.

La caída en los rindes, fruto de una sequía instalada en las distintas zonas agrícolas del país desde hace ya más de dos meses, establecerá que en el caso de las sojas de segunda directamente no se cubran los costos de producción.

Esta adversidad productiva se añade a una ya consistente en el mercado: la sensible caída del precio de la oleaginosa, que está unos US$ 150 menos por tonelada en relación a lo que valía a esta altura de la zafra anterior.

Este lunes el indicador de www.agroterra.com.uy daba cuenta de un precio por la tonelada de soja (julio de 2015, Chicago) de US$ 351,3 (con una baja del 0,8% en relación a la referencia del viernes pasado).

El ingeniero agrónomo Carlos Dalmas, productor y asesor privado, desarrolla sus labores agrícolas y asesoramiento en chacras de Canelones, Colonia y Soriano.

En diálogo con El Observador, explicó que en la zona de Colonia, donde ayer estaba trabajando, "recién esté arrancando la cosecha, irá un 15%, pero como está todo muy seco avanza a un ritmo muy rápido". 1.000 kilos menos de lo esperado

Lo que se observa, indicó, es que en relación a las expectativas de rendimiento trazadas en febrero, antes que se planteara el actual escenario de sequía, "estamos 1.000 kilos por debajo de lo esperado".

Tras precisar que "hay de todo", indicó que en esa zona se han dado rendimientos de 2.300 kilos por hectárea a otros de 3.300 kilos, por lo que se puede establecer que en este momento el rendimiento promedio se ubica hoy en unos 2.600 kilos.

Admitió que eso vale para la soja de primera que luce mejores condiciones, por lo tanto, de ahora en más lo esperable es que los rendimientos disminuyan conforme pasan los días, sobre todo cuando se comience a cosecha la soja de segunda, que fue mucho más castigada por el escenario de déficit hídrico mencionado.

"De aquí en adelante va a bajar el rendimiento; a lo que se sembró más tarde la seca lo agarró en un período mucho más crítico", afirmó.

La situación descripta, comentó, es similar en Canelones y Colonia. En el caso de Soriano, entiende Dalmas, "hubo algunas lluvias más importantes cuando se dieron y los rendimientos pueden estar un poco por encima de eso".

Consultado sobre si esos rendimientos, que se ajustarán a la baja cuando se establezcan los promedios definitivos, cubren los costos productivos, señaló que depende de cada caso.

"En mi caso en la soja de primera lo más probable es que empate, porque se han dado rendimientos por encima del promedio. En general, en las sojas de primera se va a empatar o se perderá algo, pero en la soja segunda se va a perder, no hay mucha vuelta con eso", lamentó.

Indicó que en el caso de la soja de segunda, si bien no se entró a cosechar, los rendimientos que deberían estar en 2.100 kilos o algo más para empatar no van a llegar a esos niveles.

Eso, además, es el panorama en el litoral, la zona en donde los cultivos están menos perjudicados. Dalmás comentó que supo de casos, por ejemplo en Florida, donde hay chacras en las que directamente no se trillará, porque no darán nada.

Otro detalle a tener en cuenta es la característica del negocio, dijo, porque el productor que es propietario si uno toma en cuenta la renta va a tener un número un poco mejor, pero el que tiene una renta un poco alta tiene más condicionado el panorama, aunque señaló que sin dudas lo que más influye es la caída que hubo en el precio de la soja en relación al valor de la campaña pasada.

"Con estos precios necesitábamos un año bueno, con rendimientos altos, para equilbrar las cuentas un poco, pero el clima no nos ayudó", reflexionó.

Finalmente, en relación a la campaña de invierno, que obviamente se verá influida por esta situación adversa en la de verano, "está todo muy frío todavía, pero no queda otra que seguir trabajando", concluyó.