(Fuente: Diego casco, Primera Hora) AUTORIDADES INFORMARON QUE BOCA DEL CUFRE FUE LA ZONA MAS AFECTADA DE LA COSTA JOSEFINA

En la pasada jornada, autoridades de la Intendencia de San José y de la Dinara mantuvieron contactos para buscar soluciones a lo ocurrido en los últimos días, referente a las casi 40 toneladas de excedente que los pescadores devolvieron al mar al conocerse la noticia de que uno de los mayores importadores (Nigeria) cancelaba la compra del producto uruguayo.

Los primeros contactos fueron establecidos ya en la noche del miércoles.

En tal oportunidad el director de la División de Higiene y Gestión Ambiental de la comuna, José Carlos Bisensang y el Jefe de la Dirección Nacional de Recursos Acuáticos (Dinara) dialogaron sobre el asunto, prosiguiendo con una reunión mantenida en la mañana de ayer.

El objetivo de la misma fue el de trazar las medidas a tomar en los próximos días, a raíz de lo ocurrido en los últimos días.

Según informara Primera Hora en la pasada edición, casi 40 toneladas de pescado fueron arrojadas al río en distintos puntos de la costa josefina luego de que se cancelara la importación por parte de Nigeria, el principal comprador sobre todo del producto de más baja calidad (Brasil y Colombia también son países compradores pero solo adquieren pescado de alta calidad).
En tal sentido se puedo saber que a partir de la reunión, la Dinara resolvió efectuar una intimación a todos los pescadores sobre la falta cometida. Según indicó Bisensang ayer, “aparentemente fue un hecho puntual y se espera que con estas medidas no se vuelvan a dar situaciones de ésta índole en la zona”.

Según se informó en nuestro departamento la zona más afectada por el vuelco del pescado en las playas fue Boca del Cufré.

La intimación fue tratada puntualmente por Dinara, organismo que posee una nómina de los trabajadores avocados a esta actividad en la costa.

De esta manera fue la misma Dinara la que les comunicó cuáles son las nuevas medidas a emplearse para la pesca en la costa tanto josefina como uruguaya.

“En caso de que el pescador vuelva a incurrir en la misma falta se le podrá sancionar,” aseguró el jerarca.

No obstante en esta primera etapa se les notifica al respecto y se les indica las prácticas que se deben evitar, “se les notificó de que en primera instancia si es para exportación que no saquen el pescado que no van a vender”.

Según lo informado ayer por Bisensang, hasta que se vuelva a producir la apertura de nuevos mercados donde colocar el producto, aquellos pescadores que consigan boga, patí o carpas, deberás devolverlas al río en altamar, es decir lo más lejos posible de la costa.

Reveló que “ya les dijimos que estamos dispuestos a aplicar las próximas sanciones si se constata que vuelve a suceder”. Consultado sobre el estado de higiene de las playas, señaló que “mandamos gente a ver cómo estaban a las playas para higienizar las mismas si es necesario”.

Igualmente según se pudo saber ayer, el inconveniente con la falta de otros mercados donde ubicar ese tipo de pescado ya habría sido solucionada, lo que habilitaría en un futuro no muy lejano a que los trabajadores retomen sus procedimientos con total normalidad.

Impacto. Por el momento el impacto no se ha notado completamente en la mayoría de los balnearios en los que se arrojaron las cerca de 40 toneladas de pescado excedente esta semana. En diálogo con encargados del Club Náutico de Boca del Cufré, éstos señalaron que por el momento no han notado nada fuera de lugar.

De todas maneras existe una clara posibilidad de que los primeros indicios se empiecen a ver en días siguientes, ya que según se supo, en el balneario Santa Regina (departamento de Colonia) ya comenzaron a observarse las primeras complicaciones en materia de peces muertos en la arena.